jueves, 23 de marzo de 2017

DANIEL ALEXANDER, UN NIÑO RESCATADO DEL OLVIDO, GRACIAS AL BEISBOL



#Cintar
#Fundonar
#Agrosirtec 
Cd. De Juan José Ríos, Guasave, Sinaloa, jueves 23 de marzo de 2017.- En la calle 16 y avenida Aguacalientita , en una vivienda de ladrillo sin enjarrar, en un cuarto de pequeñas dimensiones donde se percibe la pobreza y prevalece el hacinamiento, en ese cuarto que sirve de cocina y recámara, vive Daniel Alexander Armenta Espinoza, un niño de 13 años. Ahí vive con su bisabuela Guadalupe Parra Rábago quien al mismo tiempo que cuida de Daniel atiende a un hijo de 42 años que padece parálisis cerebral. Las circunstancias, desde su nacimiento, llevaron a Alexander a quedarse en esa casa,  es parte de su familia. Esta condición de extrema carencia se recrudeció luego de que sus padres Hugo Armenta y Dalia Espinoza se separaron hace seis años y la madre de Daniel tuvo que salirse de su casa con dos de sus hijas, Odalis y Vanesa, dejando a Daniel al cuidado de su padre pero que al final terminó bajo el amparo de su bisabuela. “Dany”, como le dicen de cariño en el barrio, estudió hasta el tercer año de primaria en la Escuela “Adolfo López Mateos”, no sabe leer y escribir. La vida del pequeño beisbolista del equipo de #AgroCheRíos en la categoría junior, transcurre en la ociosidad, lo más productivo lo realiza por la tarde cuando acude a la Unidad Deportiva  a jugar béisbol. Ese niño que, como afirma Misael Mondaca, su manager, posee cualidades especiales, velocidad, agilidad, potencia, fuerza en bateo, por algo es uno de los dos niños seleccionados de Che Ríos para participar en el Torneo Regional de Beisbol que se realizará en San Luis Río Colorado en Sonora en el mes de mayo, es uno de los seleccionados de la Liga Teodoro Higuera de Ahome. El gusto por el beisbol de Alexander, no le viene de familia, sus padres nunca han estado interesados en ese deporte, ni les emociona que su hijo tenga sueños por este deporte. La pasión beisbolera de Daniel nació al acudir con sus amigos de la barriada a la Unidad Deportiva y fue ahí donde lo vieron jugar, “cascareando” con la plebada, lo observó el actual manager del equipo de #AgroCheRíosCintar de la Clemente Grijalva, Arturo “Lulys” López y el empresario frijolero Guadalupe Miranda se interesó por integrar al niño a uno de sus equipos. Hasta el momento se observan excelentes resultados pues aquel niño que se dedicaba todo el día a la vagancia hoy se aplica, de tiempo completo, a practicar el deporte que más le emociona, el beisbol. Sus dos hermanas, Odalis y Vanesa estudian actualmente en la Escuela Primaria “Constitución”, sólo “Dany” no estudia y se muestra bastante reacio a volver a la escuela, dice que le da vergüenza, que ya está muy grande para regresar a cuarto grado y que ya no tiene ganas. El padre del pequeño beisbolero apenas estudió el cuarto grado de primaria y la madre, al parecer, concluyó su educación secundaria. El pequeño Daniel no tiene el ambiente que le impulse, le fomente el amor por el estudio, al contrario, todas las condiciones en que vive de extrema pobreza lo inhiben para continuar sus estudios. El único espacio saludable es el que le brinda ahora #AgroCheRíosCintar, una protección segura para cultivarle su amor por el deporte, pero falta el complemento. Afirma su madre, Dalia Espinoza, que el pequeño nunca ha sufrido de agresión familiar, es decir no sufre de golpes. No dudamos, pero seguramente, lo que no sabe la progenitora del niño es que el “olvido y desinterés” de ambos padres también hiere. Producto de lo anterior es un niño que dejó de amar la escuela pero que se enamoró del beisbol. Es notorio que a Daniel le ha afectado la separación de sus padres. Su actitud huraña, desconfiado, receloso con los que se le acercan. Afuera del diamante es vagancia, se escurre entre las casas, las de sus abuelos y amigos, en todo ese círculo que le rodea hay pobreza. Dentro del diamante, es otra cosa, el completo universo, se mueve como si ningún trauma o dolor lo acompañara, toda la felicidad cabe en los arreos de beisbol y en su uniforme. Afirma que le encanta jugar de Shortstop entre la segunda y tercera base, la más difícil y dinámica que hay en el campo de juego. Los que lo han visto jugar, entre estos, el mismo Misael Mondaca y Arturo López, dicen que el chiquillo tiene mucho potencial y que puede servir de inspiración a muchos niños del barrio dónde vive y que tampoco estudian ante el marcado desinterés de los padres. Platicamos con Lupita Sanchez Garjeda, la madre del otro niño seleccionado, Pedrito Sánchez, que se ha echado a cuestas el llevar y traer a Daniel a los entrenamientos a la ciudad de Los Mochis, son los preparativos para el encuentro regional en Sonora. Dice, Lupita, que el niño Alexander enfrenta graves carencias económicas. Una de ellas es que necesita urgentemente la cantidad de 7 mil pesos para acudir a la justa deportiva. Una persona ya le donó la mochila, otros están cooperando para el camión, pero le faltan recursos para comprar los tenis y spikes de beisbol entre otras cosas como el pago del hospedaje y alimentos. Este es un llamado urgente a todos los que le quieran apostar al futuro prospecto y se animen a poner el recurso que patrocine a esta noble criatura. Este es un ejemplo de como el deporte rescata niños de la vagancia y los aleja de las drogas.  #AgroCheRíosCintar, la empresa de Guadalupe Miranda ya está poniendo la parte que le corresponde, pero esto no es trabajo de un solo hombre, se ocupa la suma de voluntades para seguir rescatando niños que como Daniel sólo piden que los apoyen. Ante el olvido de los padres, ante la nula presencia del apoyo de las autoridades municipales, sólo queda acudir al espíritu generoso de la sociedad y empresarios para seguir rescatando niños. #La300







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