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| De izquierda a derecha, Arturo Armenta Rosas, Leopoldo Rosas Urías e Indalecio Sandoval González |
#LaDemanda
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Reclaman indemnización tres ejidatarios
afectados por la paramunicipal
Por Jorge Luis
Montiel
Cd. De Juan José Ríos, Guasave,
lunes 29 de mayo de 2017.- Se trata de una demanda que data de muchos años y
que tiene atoradas las aguas negras residuales de Juan José Ríos y debido a
ello la red del sistema de drenaje se encuentra colapsado. Pocos habitantes de
Che Ríos están enterados de la demanda que en su momento interpusieron los
ejidatarios Leopoldo Rosas Urías, Arturo Armenta Rosas e Idelfonso Sandoval
González en contra de la paramunicipal al afectar sus parcelas cuando pasaron
las tuberías provenientes del cárcamo principal que en su momento bombeó las
aguas de todo el drenaje de la ciudad hacia la laguna de oxidación.
Afirman los afectados que la
Jumapag nunca les avisó de los trabajos que se realizarían, ellos se enteraron
cuando la compañía que se le adjudicó la obra se metieron a los terrenos de los
ejidatarios y comenzaron a perforar y a hacer las zanjas para meter la tubería
pero nunca les pidieron permiso.
Al tiempo la tubería comenzó a
tener fugas en diversos tramos, el agua apestosa comenzó a invadir sus predios
agrícolas y de agostadero. Arturo Rosas se muestra molesto cuando recuerda que
debido a lo anterior se le murieron unos animalitos de su corral, eran como
tres vacas y un becerro dice que se intoxicaron y murieron envenenados al beber
de esa agua contaminada. Hasta el momento nadie ha respondido por los daños
afirma.
Indalecio Sandoval, asegura que
perderá su parcela ya que en ese momento de la fuga de agua, producto de los desperfectos
de la tubería, invadió parte de su parcela y esa humedad contaminada provocó
que aflorara el salitre. La afectación fue constante dijo Sandoval González y para
cuando cortaron el agua cochina el daño ya estaba hecho.
De la misma forma, Leopoldo Rosas
se queja de que el agua del drenaje invadió su predio cuando lo tenía sembrado
de trigo y buena parte de este no pudo trillarlo ya que estaba húmedo producto del
agua contaminada. Expresa el ejidatario que junto a su predio se encuentra una
válvula, un respiradero de la tubería del drenaje que cuando se tapaba arrojaba
agua que inundaba su parcela, afirmó.
Afirman que al momento de los
daños acudieron a la Jumapag para que reparara las tuberías cosa que no
hicieron y al mirar que la paramunicipal no resolvía el problema decidieron
interponer una demanda por afectación. A partir de esa medida jurídica y ante
las fugas “incontrolables” del agua de drenaje la empresa decidió paralizar los
trabajos del cárcamo y con ello dejó de bombear el agua residual y cortaron el
tubo principal que conectaba a la maquinaria de bombeo y las aguas apestosas
las desviaron al dren contiguo que bordea a la ciudad para que el cochinero se
fuera la estero del lugar.
Al preguntar a los ejidatario el
tiempo que llevan con la demanda y con sus terrenos afectados no supieron precisar
la fecha, estimaron entre cuatro o cinco años. En ese lapso dicen que los han
visitado funcionarios de la Jumapag de la pasada administración para tratar de
negociar con ellos pero han sido puros “peces chicos, ningún pez gordo los ha visitado” manifiestan con
ese ejemplo.
Es decir, gran parte del problema
del taponamiento del drenaje de la ciudad se debe a que el cárcamo principal no
funciona, está paralizado y al no succionar el agua residual a través de su sistema
de bombeo, el agua sale lentamente gracias a la gravedad o en el peor de los
casos se queda estancada formando tapones que tarde o temprano colapsan la
tubería. Todos hemos sido testigos del problema del
drenaje en diversos sectores de la ciudad y no es exagerado afirmar que vivimos
encima de aguas pestilentes estancadas.
En la 300 hemos publicado muchas
demandas ciudadanas de viviendas afectadas por este problema y seguramente que
mientras la Jumapag no se acerque a negociar con los afectados y resarcir el
daño ocasionado, seguiremos padeciendo el problema. Sugerimos que ya nos les
manden funcionarios de segunda que no resuelven nada, asuman su responsabilidad
y resuelvan apegados a derecho.
Los ejidatarios están convencidos
de no dejar que la paramunicipal les siga ocasionando daños y no permitirán que
se vuelvan a meter a sus parcelas sin que antes les pidan permiso y convienen
con ellos la forma del pago por daños y perjuicios.
Ahí están las grabaciones de los
tres ejidatarios afectados, escúchenlas, son el testimonio verbal de lo que
describo en mi nota informativa comentada. #La300© #HablandoFuerte©
Escucha la entrevista aquí: https://soundcloud.com/jorge-luis-montiel-802582658/leopoldo-e-indalecio-lunes-29
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