Cd. De Juan José Ríos, Guasave, jueves 28 de septiembre de
2017.- Vecinos de la calle 13 entre Avs. Maquicoba y Sabinos denuncian que la
Jumapag les condiciona el arreglo del drenaje siempre y cuando se presenten a finiquitar
sus adeudos. Cuando las vecinas han acudido a poner la queja del drenaje
colapsado que ya invadió de aguas apestosas los patios traseros de las
viviendas, funcionarios de la paramunicipal les preguntan si ya pagaron sus
recibos y si la respuesta es negativa les contestan categóricamente que “Si
pagan les arreglamos el drenaje, si no pagan, no les arreglamos”.
Las familias Castro Vidales, Ruelas Nevarez, Reyes Burboa,
Cortez Calderón, Díaz Castillo, entre otras más se encuentran invadidos de
aguas negras, una enorme laguna verde llena de gusanos se acumula en los patios
traseros. Esa agua pestilente ya invadió las viviendas de los vecinos de la
calle 14, entonces el problema es aún más grande.
Todos se quejan de dolores de cabeza, náuseas, urticarias,
etc. Estar cerca de la enorme charca lodosa es imposible, la hediondez irrita
el olfato y expele un olor amargo. Molestos los vecinos piden que acuda el
síndico Noé Urías Benítez y la alcaldesa Diana Armenta a pasar un buen rato
cerca del lugar para que sientan y vean las condiciones en que están viviendo.
Con el micrófono de la 300 y cámara en mano recorrimos siete
viviendas, todas por las mismas condiciones. El problema comenzó el 15 de septiembre en casa de la Señora Paz
Moreno, observamos que sin estar usando los baños, lavaderos y lavabo de la
cocina, el agua negra escurre a borbotones producto de que la obstrucción
principal viene de la calle. Doña Paz dice que ya acudió a las oficinas de la
Jumapag y le dijeron que si no pagaban sus adeudos no les iban a arreglar.
Luego visitamos la casa de Dolores Castro Vidales, en este
predio o solar es donde se forma el principal encharcamiento. En ese lugar el
Señor Pilo Calzada comentó que “era insoportable vivir en esas condiciones y
pidió la presencia en el lugar del síndico y la presidenta municipal”.
En la vivienda de la Señora Oralia Ruelas observamos los
registros de su domicilio hasta el tope de aguas de desecho y en su patio
abrieron una zanja para que el líquido podrido corriera hacia el fondo del
solar. En el pestilente afluente o arroyuelo se ven cúmulos de gusanos. Oralia ha
desparramado cal para secar el penetrante y asqueroso encharcamiento. De la
misma forma, la Señora Ruelas expresa que en la Jumapag le han dicho que si
pagan sus adeudos van a ir a arreglar, pero que si no pagar que se olviden, no
arreglarán el problema.
En este mismo sentido, la Señora Angélica Guadalupe Apodaca
Valenzuela, se manifestó muy molesta por la falta de respuesta de la Juamapag,
afirma sentirse muy mal, con fuertes dolores de cabeza y que ya no aguanta las
condiciones insalubres en que están viviendo. #La300 ©
NOTA DE LA 300
Este material lo haremos llegar a la Comisión Estatal de
Derechos Humanos ante la respuesta que han recibido, según los vecinos, de
parte de funcionarios de la Jumapag que condicionan el bienestar y la salud de
muchas familias ante la falta de pago de sus recibos de consumo de agua. De
igual forma haremos llegar los testimonios a la Comisión de Salud y a la
Comisión de Derechos Humanos del Congreso del Estado. ©
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